Por Lorena Serrano / @LoLo2893
Resulta que yo era muy pequeño, nací sietemesino. Le nombraron a Gabito García como mi Padrino. Él es mi padrino, un padrino pelón que nunca daba nada. Un día me llamó de Santa Marta:
–Jaime, ¿tú quieres cenar con Woody Allen?
–Oye, Gabo, ¿me estás mamando gallo o es que es verdad?
–Ya estoy en Cartagena, vamos a comprar el tiquete.
Jaime García Márquez relata decenas de anécdotas sobre su hermano el ‘Gabo’, ilustre periodista que dio nombre a uno de los festivales dedicados al oficio más importantes de Iberoamérica. Entre el 29 de septiembre y el 1 de octubre pasados, se celebró la cuarta edición del Premio y Festival Gabriel García Márquez de Periodismo convocado por la Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI).
Un buen café auguraba una jornada irrepetible en el Jardín Botánico de Medellín. La gente no dejaba de llegar. Periodistas, estudiantes, noveleros, soñadores recorrían el Jardín con sonrisas nerviosas y ataviados de cámaras, grabadoras y una libreta de apuntes.
Martin Baron, Director de The Washigton Post, ofreció el discurso de inauguración. Entre otras cosas, y en una larga alocución, Baron habló sobre la conducción de la investigación que inspiró la película Spotlight. También comentó los nuevos retos del periodismo ante una libertad de expresión reprimida por varios gobiernos y por la marcada violencia que vive el mundo. “Todas las herramientas tecnológicas del mundo no pueden sustituir el periodismo fuerte –dijo, enfático–, el periodismo que informa a nuestra comunidad y a nuestro país, que forma las bases de nuestra sociedad civil y de los gobiernos democráticos”.
Ser parte del Festival de Gabo es una experiencia única. Puedes tener acceso a las charlas y eventos generales. Puedes ser un tallerista que se postuló y fue elegido para uno de los talleres especializados que se ofrecen cada año, con reconocidos periodistas que relatan sus vivencias y comparten con sus colegas conocimientos del oficio. Asistir a un taller es la oportunidad perfecta para intercambiar experiencia de otras realidades iberoamericanas.
Conocer las vivencias profesionales de afamados periodistas como Judith Thurman, del The New Yorker, que en su taller confesó haber reescrito 28 veces el primer párrafo de un artículo suyo, o escuchar las críticas que recibió Anthony Scott, crítico de cine y ensayista de The New York Times, sobre su reseña de la película Avengers; descubrir nuevas herramientas digitales para contar historias en la web; entender la lógica de la industria musical con Diego Fischerman, crítico musical y periodista en Página/12, y toda la serie de actividades dedicadas en profundidad al periodismo hacen de este encuentro una convivencia capaz de generar lazos.
El Faro, de El Salvador, se llevó el Premio a la Excelencia gracias a su arduo trabajo de 18 años. Ellos se iniciaron como un periódico digital en 1998, cuando solo el 1% de la población salvadoreña tenía acceso a internet y cuando hacer periodismo en la web era una verdadera aventura. Oscar Martínez recordó entre risas: “Pasamos 7 años cometiendo muchísimos errores pero siempre escribíamos como si todos nos leyeran. La actitud de mejorar, innovar y contar esas otras historias siempre nos motivó cada día”.
- Mira quiénes fueron los ganadores del Premio Gabo en todas la categorías, aquí.
De esto se trata el periodismo. De reconocerse en el otro y desde la vivencia de otros periodistas y medios construir nuevas ideas, relatar otras realidades y hacer así un periodismo que no pacte con ningún poder político o económico, pensando solamente en el beneficio de sus audiencias. El Faro es ahora uno de los más grandes ejemplos de periodismo ético y de calidad en Hispanoamérica y el mundo.
“Una intersección entre periodismo, cultura y ciudadanía de una manera cálida que haga que todos nos sintamos integrados”. Esto fue lo que se buscó durante el Festival Gabo, en palabras de Jaime Abello, Director General de la Fundación, además de rendir un homenaje a Gabriel García Márquez como uno de los maestros del oficio en el continente y en el mundo. Cada año, el Nobel de Aracataca, autor de una de las obras literarias y periodísticas más sustanciosas que se conozca, es el personaje central.
Al final de una noche única, en un famoso restaurante:
–Oye, Gabito, estuve a punto de tomarte una foto con Woody Allen –le dijo Jaime a su hermano ya archifamoso.
–¿Y por qué carajos no me tomaste la foto?
–Me habrías regañado.
–Claro que sí, pero me habría quedado con la foto.
- Escucha los cuatro objetivos de este encuentro:
El festival de Gabo es el encuentro de periodistas y futuros periodistas para dialogar sobre el que su mentor llamaría el mejor oficio del mundo. Hay tanto por decir que durante estos días, cada año, lo mejor del periodismo iberoamericano se junta para reflexionar y soñar en grande. Se busca contar y compartir historias que permiten comprender y transformar la realidad, incentivar a la innovación y a la coherencia ética, que tanta falta hace en estos tiempos.
En 2017 se vivirá el 5to Festival de Gabo y desde ya se ajustan los preparativos.
- Mira aquí quiénes fueron los finalistas del Premio.
