Por Estéfano Dávila Ferri *
Cada una de las presentaciones de Apple se ha convertido en un ritual. El valor simbólico de las acciones de este ritual refuerza la creencia fuerte de que cada uno de los productos de la compañía de la manzana ha sido construido con una combinación de magia, polvo de hada y sangre de unicornio.
Pero por detrás del ritual, hay bastante desarrollo e investigación, y trabajo fuerte de un equipo de desarrolladores, ingenieros y diseñadores que durante años han logrado implementar nuevos estándares en una serie de productos que apoyan tanto a la industria como al ocio.
Apple ha logrado un equilibrio entre una filosofía de trabajo y una línea de producción de hardware y software que le ha permitido pasar de ser una empresa al borde de la eminente quiebra a ser una de las compañías con mayor capital del mundo en el curso de un poco más de una década. Y eso no lo puede decir cualquier empresa.
Hardware y producción
Al más puro estilo de Steve Jobs en su discurso de Stanford (si no lo han visto, háganlo ahora mismo ) la presentación de este año tuvo tres puntos de gran importancia: el nuevo iPhone, el iPad Pro, y el nuevo Apple TV.
¿Qué hace cada uno de estos aparatos?
Comencemos por la tableta. El iPad Pro es un iPad con esteroides. Con un precio base de USD 799 en Estados Unidos, podría decirse que es el tablero de Candy Crush más caro del mundo. Y eso sin contar con los accesorios: La cubierta/teclado cuesta USD 169 y el ‘Lápiz’ cuesta USD 99. Claro que hay quienes lo usan para algo más que romper caramelos virtuales: el nuevo iPad permite hasta ejecutar aplicaciones de diseño bastante poderosas, y tiene una capacidad de procesamiento como ninguna otra de las tabletas que Apple ha sacado hasta ahora. Y también puede ejecutar aplicaciones en simultáneo. ¿Qué quiere decir esto? Que quienes así lo necesiten, podrían ejecutar a la vez un documento de Word y una hoja de Excel, función que estará habilitada desde la nueva versión del sistema operativo, el iOS 9.
Ahora, el nuevo iPhone. Además de las mejoras en las cámaras del teléfono (12 megapíxeles para la trasera y 5 para la delantera), la pantalla del nuevo ‘smartphone’ será capaz de responder a la presión que reciba. Ligeros toques darán unas funcionalidades a las apps, mientras que toques de mayor fuerza permitirán otras funcionalidades como, por ejemplo, accesos directos a funciones específicas.
Por último, el Apple TV que, ahora sí, se ha convertido en la pequeña caja que permite convertir en ‘Smart TV‘ a prácticamente cualquier caja boba. Este decodificador puede ejecutar YouTube y Netflix, lo que le convierte en una verdadera alternativa para quienes consideran que no pueden costear los servicios de televisión paga que se ofrecen localmente.
El polvo de hada de estos tres aparatos está realmente en manos de los desarrolladores de apps.
¿Quieres bajar de peso? Hay una app para eso.
¿Quieres producir música? Hay (mucho más de) una app para eso.
¿Quieres editar video? Hay una app para eso:
¿Quieres editar fotos? Hay una app para eso:
Ok, esto se está poniendo repetitivo… así que sigamos.
Filosofía y lógica de mercado
Mucho del legado de Jobs se está perdiendo en el camino y, aunque soy el primero en entristecerse por esto, también soy el primero en admitir que eso no necesariamente es algo malo: él tenía una clara fama de ser necio y testarudo en muchas cosas, y aunque eso ayudó a Apple a levantarse en un momento de franca caída, también representó perder algunas oportunidades.
Según se recoge en la biografía de Steve Jobs escrita por Walter Isaacson, el fundador de Apple siempre consideró que Android era una copia vulgar de iOS, el sistema operativo de los teléfonos y tabletas de Apple.
En palabras de Jobs: “Pusimos iTunes en Windows para vender más iPods, pero no veo la ventaja de incluir nuestra aplicación musical en este otro sistema, excepto para hacer felices a los usuarios de Android. Y yo no quiero hacer felices a los usuarios de Android”.
Esta frase particularmente refleja cómo la testarudez de Jobs probablemente le costó millones a Apple. Ahora que han pasado prácticamente 4 años de la muerte del fundador de Apple, la compañía dio el giro y anunció que Apple Music estará disponible para dispositivos Android. ¿Por qué? Seamos realistas, para 2015, casi 83% de los usuarios de dispositivos móviles en el mundo tienen a Android por sistema operativo, mientras que el sistema de Apple, iOS, es utilizado por 13,6% de los usuarios. Si Apple lograra convencer solo al 20% de usuarios de Android de suscribirse a Apple Music, obtendría más ingresos de los que podría obtener de todos los usuarios de iOS juntos.
Ahora que han pasado prácticamente 4 años de la muerte del fundador de Apple, la compañía dio el giro y anunció que Apple Music estará disponible para dispositivos Android.
Ahora, ¿es todo esto realmente necesario? Hace unos años, yo era el primero en burlarme de los teléfonos que tenían cámara de fotos. Solía decir que compraría uno cuando también incluyera una afeitadora. Hoy, este tipo de dispositivos son fundamentales para mi trabajo y se han vuelto algo bastante necesario más allá de lo laboral.
Podría decir, sin temor a caer en un lugar común, que se han vuelto una parte importante de mi vida.
Podemos ir en paz.
Demos gracias a Steve Jobs.
*Estéfano Dávila Ferri (Quito, 1978) ha pasado los últimos 15 años entre computadoras. Dice que más por curiosidad que por hacer una carrera. Trabajó en las ediciones digitales de diario Hoy, diario El Comercio, diario Últimas Noticias, y fue editor PCWorld y Computerworld Ecuador. Fue director de Comunicación de la tercera edición de Campus Party Quito. Es Coordinador de GuaiFai, sitio de información de tecnología de Diario El Comercio, de Ecuador y colabora con La Barra Espaciadora desde septiembre del 2015.