Por Andrés Loor
El domingo 6 de diciembre, la comunidad colombiana y refugiada que vive en la ciudadela La Fragata, de Guayaquil, celebró la Fiesta de las Velitas, con la que ellos recordaron la vigilia que realizaban en su país de origen por el Día de la Inmaculada Concepción.
50 colombianos y 10 ecuatorianos prendieron las velitas y pidieron sus respectivos deseos, tal como manda la tradición. También pintaron un año viejo gigante, costumbre guayaquileña que –según la oralidad popular en ciertas zonas de la ciudad– se inició tras el regreso de un migrante ecuatoriano quien, admirado por las Fallas de Valencia, creó el primer monigote gigante con la cabeza de Osama Bin Laden y el cuerpo del muñeco diabólico Chucky. Así, los monigotes de gran tamaño se impusieron sobre los históricos muñecos heredados de la época colonial.
Como en todos los rincones del Ecuador, los colombianos residentes en Guayaquil recordaron sus tradiciones agradeciendo a la ciudad que los ha recibido. Cada año, este tiempo es especial para los colombianos que no residen en su país, pues la Fiesta de las Velitas, como la llaman todos, es también una oportunidad de reunión entre seres queridos. Esta es una serie de imágenes sobre esta celebración.
Andrés Loor es fotógrafo, activista y músico guayaquileño.
(andres.loor87@gmail.com)
