Por Francisco Garcés / La Barra Espaciadora.
Según un estudio geográfico realizado por Salvatore Eugenio Pappalard y Massimo De Marchi, y publicado por Geoyasuní, los datos oficiales usados durante la Décima Ronda Petrolera determinan que el bloque ITT ha crecido un 58,05%, pasando de 121.314 a 191.740 hectáreas
De las 8.542 hectáreas originales dentro de la Zona Intangible, ahora, ahí son 30.202 hectáreas, es decir, un incremento del 253%. Dentro del Parque Nacional Yasuní el bloque originalmente tenía 86.800 hectáreas, pero ahora tiene 106.034 y fuera de esa área protegida, el bloque creció 148%, pasando de 34.513 hectáreas a 85.705 hectáreas. Estos son los números del nuevo bloque ITT sobre el que ahora el Gobierno tiene vía libre para la explotación petrolera
Algunas precisiones sobre los mapas
El Parque Nacional Yasuní es el área natural más diversa del país y tal vez del mundo. Desde 1989 es reserva de la biósfera declarada por la UNESCO. Tiene casi 10 mil kilómetros cuadrados que comparten las provincias de Orellana y Pastaza. En los últimos años, las actividades extractivas, en especial la petrolera y la maderera, han puesto bajo amenaza esta joya natural del oriente ecuatoriano. Siendo ahora la explotación de los bloques 31 y 43 (ITT), muestra de ese acecho.
La Zona Intangible Tagaeri Taromenane es una extensión de alrededor de 700 mil hectáreas ubicadas hacia el sur del Parque Nacional Yasuní, aunque una buena parte de esta zona está fuera de los límites del parque. Esta área tiene una jurisdicción legal especial ya que la Constitución establece que no se la puede violentar por ser el hogar de varios clanes de indígenas en aislamiento. No obstante, varias concesiones petroleras amenazan también esta zona.
El Bloque original
En la siguiente serie de mapas se verá como en los últimos años la extensión del bloque ITT se ha modificado y ampliado constantemente. Las razones para estas modificaciones no las conocemos -las autoridades no las han dado- pero lo cierto es que la extensión desde el bloque original, hasta el actual, casi se ha duplicado.
El bloque original tenía sus límites casi 100% dentro del Parque Nacional Yasuní. La actividad de exploración en este sector empezó en 1943 a cargo de la compañía Shell y estos trabajos se hicieron hasta el 2002, ya a cargo de la nacional Petroecuador. Una parte de los límites, hacia el sur, están dentro de la Zona Intangible, esas líneas se extendieron, después de que se conoció la existencia del campo Ishpingo, el más rico del bloque.
La primera ampliación
El primer cambio en la extensión del bloque parecería ser operativo. El límite norte simplemente se amplía para que coincida con el del vecino bloque 31. Esta ampliación facilita la actividad dentro del bloque, al cual se podrá acceder directamente a través del río Napo, además de que permitiría también extender la infraestructura ya montada en la parte norte del bloque 31, ya en fase de explotación. En el mapa a continuación –que es uno de los que aparece en el documento con el que el Ejecutivo pidió a la Asamblea que se conceda la autorización de explotación- se puede apreciar que el límite sur del bloque se mantiene inalterado.
Un mapa enigmático
Uno de los cambios más radicales de la forma del bloque aparece en un mapa hecho por Petroecuador –que también consta en el documento entregado por el Ejecutivo a la Asamblea-. En este, el bloque se extiende en su lado oriental, llegando hasta la frontera con el Perú, pero también en el lado sur, con el mismo criterio de unificar el límite sur con el del bloque 31, pero ingresando radicalmente en la Zona Intangible. Lo curioso de este dibujo del bloque es que aparece intermitentemente en varios mapas desde tiempos de la novena ronda petrolera. La Secretaría de Hidrocarburos lo usó también el año pasado, cuando se publicó el mapa de la Decimoprimera Ronda Petrolera. No obstante, este límite del bloque, al parecer nunca se usó como oficial para los procesos de negociación de esa área de explotación. Ahora sigue apareciendo en documento oficiales, como el que reposa en la Asamblea.
El bloque final
Pero en medio hay un nuevo catastro petrolero que establece los límites oficiales de los bloques. Este se modificó en el 2011 durante la Décima Ronda Petrolera, para la cual se impusieron nuevas normas de conformación de los bloques, limitando su extensión a 200 mil hectáreas. Por eso, bloques como el 14, 16 y 17 redujeron su extensión y sus límites casi dejaron de estar dentro de la Zona Intangible. Pero esta decisión no afectó al bloque ITT, cuyo límite sur se oficializó dentro de la Zona Intangible y el norte se extendió hasta colindar con la Reserva Faunística Cuyabeno. Aunque el crecimiento del bloque se produjo durante la vigencia de la Iniciativa Yasuní ITT, sus nuevos límites ahora benefician a la visión extractivista.
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