El candidato de la Unión por la Esperanza (UNES) -una alianza entre el Movimiento Centro Democrático, de Jimmy Jairala, y el Movimiento Revolución Ciudadana, escisión de Alianza PAIS que respalda al expresidente Rafael Correa Delgado- promete regalar 1 000 dólares a 1 millón de familias para aliviar el impacto de la pandemia.
Antes de ser candidato a la Presidencia de la República, Andrés Arauz estudió Economía y Matemáticas en la Universidad de Michigan, en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso Ecuador) y en la Universidad Nacional Autónoma de México, donde inició un doctorado en Economía Financiera que aún no ha terminado. Fue ministro coordinador de Conocimiento y Talento Humano durante el gobierno de Rafael Correa y es recordado por haber firmado un polémico contrato por el Festival de las Artes Vivas de Loja, mientras estuvo a cargo del Ministerio de Cultura y Patrimonio, durante apenas un mes. El monto de ese contrato bordeó los 6 millones de dólares por un plazo de dos años de ejecución. Cuando se le pregunta sobre el tema, Arauz se justifica diciendo que era «quien mejor conocía» el sector y enseguida dice que también aprobó la descentralización de los recursos para la Casa de la Cultura y sus núcleos provinciales.
Lo mismo hace con asuntos como el proyecto de la llamada Refinería del Pacífico, en el que el gobierno de Correa gastó 1 501 millones de dólares sin concretar nunca la instalación. Arauz justifica o evade. Dice que ese es «un dato errado» y que el valor que se gastó incluía la construcción del acueducto La Esperanza, que dota de agua potable a comunidades de la zona. «Repetir lo que viene en memes o en documentos que buscan desinformar a la ciudadanía no creo que es lo correcto», reclama.
-¿Usted cree que el Estado debe ser quien decide lo que es el buen periodismo? -le pregunta David Avilés.
-Yo creo que hay un marco constitucional de Derechos Humanos para la libertad de expresión, para la libertad de prensa -contesta Arauz-, pero también hay un marco constitucional y tratados internacionales de Derechos Humanos relativos al acceso a la información pública, al acceso efectivo a una información verdadera, es decir, que haya verdadera accesibilidad a la comunicación en todo el territorio nacional. Hay tratados internacionales relativos al buen nombre, al respeto a la intimidad, a la no promoción ni del odio ni de la xenofobia ni de la violencia ni del machismo, así que yo creo que hay un marco de Derechos Humanos a nivel nacional e internacional que será un marco suficiente para que podamos, efectivamente, establecer la relación entre los medios de comunicacion y el sistema de justicia, por ejemplo…
Luego, Andrés Arauz se refiere a los creadores audiovisuales, músicos y otros gestores culturales para responder a la misma pregunta.
En sus apariciones públicas, el candidato sonríe la mayor parte del tiempo y recurre a enaltecer lo que se hizo durante los 10 años en el poder del expresidente Correa. A pesar de que el actual mandatario, Lenín Moreno, fue su vicepresidente y llegó al poder con el impulso de Correa y con el ahora preso Jorge Glas como vicepresidente, Arauz usa sus abundantes errores y el fatal manejo de la pandemia como catapulta para su campaña.
¿Qué hará Arauz para combatir los vínculos entre políticos y narcotraficantes? La situación de violencia que existe en la frontera colomboecuatoriana, y que estalló en el 2018 con un atentado al cuartel policial en el cantón San Lorenzo, se cobró la vida de cuatro marinos, una pareja y un equipo periodístico de diario El Comercio, fue parte de una de las preguntas en la entrevista. Pero el candidato correísta no respondió sobre el tema específicamente. Dijo, eso sí, que el narcotráfico es un problema transnacional y que se fundamenta en los consumidores de drogas que están en los países de destino «como EE.UU.»; «que ha influido en América Latina”. Para Arauz, el tema de drogas es un asunto de salud pública, dice que instalará clínicas de rehabilitación ambulatoria y aclara: “Si es que somos suficientemente inteligentes de detectar dónde están los principales mecanismos a través de los cuales operan carteles, redes de tráfico, etcétera, podemos contribuir a disminuir su fuerza y su influencia en nuestra sociedad”.
Una de sus propuestas más polémicas es entregar USD 1 000 a un millón de familias durante los primeros días de su eventual gobierno. A pesar de que el Estado ha tenido problemas incluso para pagar sueldos a tiempo durante la pandemia y para entregar fondos a sectores prioritarios como el de la salud, Arauz afirma que «es perfectamente posible». Se vanagloria de que su especialización académica sea la economía financiera y señala que “el mecanismo de financiamiento provendrá de las reservas que actualmente tiene el Banco Central depositadas en el Banco de Basilea, en Suiza, nosotros repatriaremos una parte de esos recursos para poderles invertir en las familias ecuatorianas». La selección de los beneficiarios -dice Arauz- «partirá» del registro social sobre las condiciones de vida que tiene el MIES, al que «añadiremos algunos criterios en materia de salud pública y algunos relativos al endeudamiento de las familias». El postulante está convencido de que en una semana logrará hacerlo. «En el siglo XXI la administración de bases de datos se puede hacer no solo en una semana, sino en pocos minutos».
En otras declaraciones, el candidato de UNES ha dicho que este dinero se entregaría luego de que los beneficiarios se inscriban por internet. En otras ocasiones ha dicho que las transferencias se harán a través de cuentas bancarias. El candidato acepta que una medida así no solucionaría los problemas de las familias, pero dice que sí da una mano «en el contexto de la negligencia brutal que ha cometido este gobierno nefasto». Arauz se respalda en que varios países han hecho cosas similares, pero olvida los datos: en Ecuador, el 57% de mujeres y el 40% de los hombres están fuera del sistema financiero, es decir, que no tienen ni siquiera una cuenta de ahorros.
Arauz evita los encuentros con sus contendores: participó apenas en uno de los tres debates organizados para las elecciones y sus respuestas no trascendieron, aunque en las redes sociales muchas cuentas trolls intentaron posicionar un supuesto buen desempeño. La estrategia de contaminar las redes sociales con desinformación se ha convertido en una de sus armas de campaña, incluso antes de que el CNE oficialmente autorizara el inicio de la misma. Sobre la posibilidad de establecer un pacto social, el candidato es tajante: «¡Pactos no!», afirma, desviando el sentido de la pregunta.
Cuando David Avilés le pidió hacer una autocrítica enfocada en el gobierno que Arauz defiende, sobre el debilitado sistema de salud que enfrenta ahora la pandemia del nuevo coronavirus, el candidato prefirió trasladar toda la responsabilidad a su ahora rival político, el presidente Moreno. Esta es una de las tácticas más recurrentes de este binomio: aprovechar la negligencia y el desprestigio del gobierno de Moreno para impulsar su imagen. Según Arauz, el Sistema de Vigilancia Epidemiológica que tenía Ecuador no fue desarmado en los anteriores periodos presidenciales. “Estuvo vigente y en el 2019 aumentaron casos de dengue, algo que fue consecuencia directa del despido de 6 000 personas del sistema de salud pública, incluyendo 2 500 que estaban dedicadas a la prevención de enfermedades metaxénicas (dengue, malaria, etc.)”, dijo. Y agregó que hubo un cruce entre la temporada de dengue y la entrada de coronavirus en Guayas. El candidato Andrés Arauz propone que exista un sistema de salud pública “de alta calidad, de acceso universal, no mercantilizada, que privilegie la vida y garantice la dignidad de las personas”.
A pesar de las dificultades que en los últimos gobiernos han tenido los médicos para especializarse, del escándalo de postgradistas impagos y maltratados desde hace por lo menos cinco años y de los casos de corrupción que empañan una estructura mucho más vieja que el actual régimen, Arauz plantea que se articule la educación con la salud para formar constantemente al personal médico y de enfermería, pero no explica cómo financiará estos proyectos ni a estos sectores.
Arauz ha vuelto parte de su discurso las promesas de vacunación con acceso universal y gratuito. Habla en cada intervención sobre su visita a Argentina, en diciembre, cuando se reunió con el presidente Alberto Fernández y dice haber coordinado la posibilidad de dotación de 4,4 millones de dosis de la vacuna del laboratorio AstraZeneca y Oxford. Sin embargo, hacia el inicio de febrero, ese país no ha alcanzado a vacunar a su población al ritmo que se necesitaría para erradicar la pandemia. De hecho, la vacunación en Argentina alcanza apenas un tercio del promedio mundial, con lo que tardaría 13 años en terminar de vacunar a todos sus habitantes.
Además, Arauz no considera que aunque esas vacunas se están fabricando en Argentina y en México no le pertenecen a ninguno de los dos estados sino a las entidades europeas. Tampoco dice que la llegada de esas vacunas y de otras está prevista desde que en octubre pasado funcionarios del gobierno de Moreno firmaron contratos y acuerdos para recibir vacunas de distintos laboratorios, incluido AstraZeneca y Oxford. El gobierno de Moreno desmintió a Arauz y deslegitimó su promesa de campaña a través del ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos y este, a su vez, es criticado constantemente por Arauz debido a su cuestionable manejo de la pandemia, el mismo que le ha puesto al borde de la destitución en varias ocasiones. La coalición Ecuador Verifica, de la que La Barra Espaciadora forma parte, chequeó la información que da Arauz y la identificó como falsa.
El viernes 22 de enero, la Agencia de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) aprobó el uso de estas vacunas y el Ministerio de Salud informó que se planifica la llegada en los próximos meses de cinco millones de dosis. El ministro Zevallos dijo en una rueda de prensa ofrecida el 20 de enero que Ecuador espera la llegada progresiva de 2 millones de vacunas de Pfizer y Biontech (8 000 ya llegaron y se completarán 85 000 hasta fines de febrero, según la versión oficial). Además de estas y los 5 millones del acuerdo con AstraZeneca -amplió el funcionario- están comprometidos 4 millones de vacunas del laboratorio Covaxx (subsidiario de United Biomedical), 8 millones de la iniciativa Covax Facility (de la alianza de la OMS y OPS en el Fondo de Acceso Global para Vacunas Covid-19, que espera garantizar el acceso equitativo a las vacunas de distintos laboratorios en el mundo). En total, se ha negociado la llegada de 18 millones de vacunas que arribarían progresivamente hasta octubre próximo, por un costo de USD 200 millones. Zevallos agregó que se está negociando también con los laboratorios Johnson & Johnson, Novax y Sinovac para conseguir más vacunas.
Aunque Arauz afirma que de ganar mantendrá la rectoría del Estado en el plan de vacunación para frenar la pandemia, agrega que a diario se ven las alianzas que hay entre lo público y lo privado como la compra de medicinas, y subraya que el Estado puede acudir a la capacidad privada «en un estado de excepción para una situación como esta”.
Entre sus propuestas, Arauz ofrece pagar las deudas que tiene el Estado con los gobiernos autónomos descentralizados, “a través de mecanismos financieros del Banco Central”. El postulante señala que los gobiernos locales cumplieron un papel importante en el confinamiento, porque se volcaron a entregar alimentos y trabajar en prevención de contagios de Covid-19, según él. Por eso critica que el Gobierno central haya decidido hacer pagos de deuda externa en lugar de atender sus responsabilidades internas. Según su criterio, las cifras de inversión en salud se derrumbaron a partir del 2018 y cita la carta de renuncia de la exministra de Salud, Catalina Andramuño, quien afirmaba que su Ministerio no había recibido las transferencias de dinero del de Finanzas.
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Sobre el IESS, el candidato dice que “siempre hay espacios para mejorar la eficiencia” y aunque “hay personas que pueden dar testimonio de que sí han recibido el mejor nivel de atención médica en el IESS“ o de la derivación a centros de atención privados, hace falta “dotarle de racionalidad al sistema de inventarios del IESS”, por ejemplo.
Además, Arauz cree que se debe volver la vista a la planificación y administración de salud “que es el cerebro de un sistema, porque contar con personal, insumos y equipamiento sin una buena coordinación, no se podrá ver mejoras”. El presidenciable ofrece recontratar a 6 000 profesionales de la salud, pero no distingue los mecanismos para esa reincorporación ni detalla si reforzará el personal médico o la planta administrativa del sector Salud, ni cómo lo va a financiar.
Sobre su visita a Argentina también señaló que es parte de su plan de integración regional latinoamericana por las “coincidencias” con gobiernos «progresistas» como el de Alberto Fernández y Cristina Fernández, expresidenta y actual vicepresidenta de ese país. Sin embargo, evitó pronunciarse sobre su postura acerca del gobierno de Venezuela. Al ser consultado sobre los 400 000 venezolanos que actualmente residen en Ecuador evade, rehúye de la pregunta. “No es necesaria una declaración política para ayudar a hermanos de otros países”, responde esquivo.
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Para la comunidad migrante de Ecuador, Arauz ofrece retomar políticas de crédito educativo y mejorar las facilidades normativas para que se pueda registrar títulos obtenidos en el extranjero y que sean reconocidos en el país. Por ahora, una de las principales preocupaciones de quienes estudian en otros países es la crisis económica que no les permite pagar sus créditos. Para ellos propone una reestructuración obligatoria de créditos y un periodo de gracia “que permita tener un alivio mientras está la parte más dura de la crisis”.
Para quienes trabajan en el exterior, Arauz plantea ampliar un modelo de seguridad social “para que los años trabajados en un país puedan ser avalados en el otro país”.
Sobre cultura, a pesar de haber estado a cargo de la cartera de Estado de ese sector, el candidato dice poco. Repite lugares comunes, como que el país “tiene retos en materia de recuperar la participación de creadores audiovisuales, músicos”, etc. y tarda en nombrar a músicos ecuatorianos que recuerde. «Rocola Bacalao», suelta con esfuerzo, banda que dice fue parte de su adolescencia. Finalmente cita a Papaya Dada, porque lo ha acompañado en la campaña, se justifica arguyendo que tiene otra cita y corta la entrevista dejando muchas preguntas sin respuesta.
Entrevistas: David Avilés Aguirre.Investigación y coordinación: Cristina Cadena. Texto: Ana María Carvajal. Caricaturas: Wilo Ayllón. Edición y dirección de contenidos: Diego Cazar Baquero.
Esta es una iniciativa de la Colectividad Ecuatoriana Autoconvocada de Artistas y Gestores, en Córdoba, Argentina, en alianza con La Barra Espaciadora, y forma parte del espacio Mi elección 2021.
